Aunque pudiera parecer que todas las gallinas son iguales no lo son, hay diferentes razas de gallinas con sus propias cualidades que se deben tener en cuenta a la hora de pensar en criar en casa gallinas. Algunas se adaptan mejor al entorno y a nuestras necesidades, sobretodo si lo que buscamos es que sean productoras o las queremos solo por criarlas. Hoy te contamos sobre las variedades de razas de gallinas.
Las gallinas se dividen en dos variedades claramente definidas, las gallinas comerciales productoras de huevos y las gallinas comerciales productoras de carne. Lógicamente ambas destinada al consumo humano, sea cuidan y alimentan de diferente forma, unas deben durar más para producir huevos y las otras engordar y estar saludable para servir de carne. Una tercera variedad reúne ambas características servir para poner huevos y constituir una fuente de carne. También podemos distinguirlas entre criollas o «del país» y las denominas «gallinas mejoradas».
Usualmente las gallinas ponedoras de huevos comerciales son especialmente concebidas luego de aplicar mejoras genéticas a la raza, con un estricto control sanitario y de alimentación que permiten que rindan en su trabajo como ponedoras. Son gallinas saludables, que sin embargo no están destinada a la crianza de pollitos, aunque anatómicamente son pequeñas producen producen huevos grandes.
En cambio las gallinas productoras de carne, como las ponedoras de huevos viven en ambientes especialmente diseñados para su mejor rendimiento, pero son gallinas que están susceptibles de enfermarse y así se consideran ya inútiles para su fin de servir de alimento, por lo que son estrictamente monitoreadas, se regula la temperatura adecuada según la edad, la humedad del galpón entre el 40-60%, buena ventilación, espacio suficiente para movilización, retiro regular de las camas, limpieza y desinfección concienzuda de los pisos e iluminación nocturna, entre muchas variedades destacan las razas Hubbard, Arbor Acres.
Las gallinas doble propósito igual producen huevos como carne, tantos huevos como se requieran hasta 200 al año, son resistentes a las enfermedades que afectan a las otras razas de gallina y por eso son productoras importantes de carne, se conocen varias razas como la denominada Rhode Island, la New Hamshire, Sussex, Plymounth Rock, Orpington y Wyandotte.
Entre las que se consideran gallina de raza 0 locales, se sitúan gallinas resistentes, que han sorteado las dificultades de entornos adversos, y que por ello mismo no se afectan tan fácilmente en las cambiantes temperatura y humedad, se alimentan de desechos varios y gusanos como insectos. Por resistentes son valiosas pero suelen ser productoras escasas de huevo y aunque sirven de carne,es poca en realidad. Todo lo contrario ocurre con las gallinas mejoradas, porque interviniendo el hombre en su genética ha combinado los mejores atributos de distintas razas produciendo razas nuevas que son más fuertes y productoras.
Gallinas de toda clase se pueden conseguir para lograr su crianza en el hogar, pero algunas lógicamente demandan cuidados que solo puede darles la industrialización así que para criar en casa son siempre mejores las gallinas del país a las que también suele conceder la calidad de tener un sabor de carne diferente, algo que los expertos consideran imposible pero que quizá para los conocedores es real. En todo modo para criar gallinas bastará con mantener limpio el entorno y evitar así que se enfermen, alimentar adecuadamente y propiciar el ambiente para que puedan producir huevos y convertirse en carne cuando se amerite.
Hay que considerar que la práctica milenaria de alimentarlas con desechos, está lejos de ser saludable, por lo que hoy en día las gallinas en el hogar deben consumir alimentos especialmente formulados, para que puedan rendir y para que puedan ser un alimento saludable como se espera llegado el momento de consumirlas como carne.
Imagen: Gallinas