La primera vez que llevamos a uno de mis gatos al veterinario este nos informó que no era sólo un gato blanco, sino que era un gato albino. Esto es que tiene un defecto genético que afecta la producción de melanina, causando la carencia total de pigmentación en la piel, ojos y cabellos. Esta condición afecta por igual a humanos y muchísimos miembros del reino animal, incluyendo a los gatos. Si tienes un gato blanco, probablemente tengas un gato albino.
Es importante reconocer las señales que pueden indicarnos si nuestro mejor amigo tiene esta condición genética especial. Lo primero que debemos observar es el pelaje, que ha de ser de un blanco puro sin una sola mancha de otro color. La piel debe ser rosada y sin ninguna mancha o lunar. Los ojos pueden ser azules (claros u obscuros) o bien de dos colores. No menos frecuentes son los albinos más extremos, que tienen ojos más bien rojos.
Si tu gato es albino precisa de algunos cuidados especiales. En cuanto a la alimentación, juego y cuidados generales son como cualquier otro gatito. Sin embargo es importantísimo mantenerlos alejados de los rayos solares, pues por su condición son proclives a desarrollar cáncer de piel. Es por ello que puedes consultar a tu veterinario para que te recomiende algún bloqueador solar que no sea tóxico y que debes colocar en la nariz y orejas del gato, sobre todo si éste se expone largas horas al sol. Trata de que no salga a recibir los rayos solares directos entre las 12PM y 5 PM, pues son las horas en que son mś intensos.
El color blanco suele estar asociado a la sordera, sin embargo esto no es algo generalizado. Hay quienes afirman que todos los gatos azules son completamente sordos, o que los de ojos bicolores son sordos de un solo oido, pero esto no es rigurosamente cierto. De hecho, mi gato es de ojos azules y no tiene nigún tipo de discapacidad auditiva. Esta creencia viene del hecho de que los gatos de ojos azules sordos tenía mayor incidencia gracias al cruce indiscriminado de ejemplares, sin tomar en cuenta la transmisión este problema; que se fijó en el características como el color azul. En estos momentos no suele ser frecuente este problema, al menos no con relación al color de ojos.
La sordera se manifiesta en los primeros meses de vida, el gatito no hace caso a su nombre ni a ningún ruido, por lo que es sencilla de diagnosticar. Si bien es cierto que este defecto es irreversible, no representa mayor problema para un gato que viva en el interior de una casa, donde todas sus necesidades están cubiertas por su humano. Si el gato llevara una vida más bien silvestre, si sería una discapacidad insuperable que causaría el rechazo de sus congéneres, dada la dificultad que tendría el gato para adaptarse al este estilo de vida en el que dependen por completo de su agilidad y astucia conjugada con sus sentidos.
Tu gato albino sólo precisa cuidados normales, aunados con un poco de protector solar y muchísima comprensión en caso de presentar alguna discapacidad auditiva.