Los perros sufren de temperatura cuando como los humanos se enferman ya de gripe o del estómago, que sí que éstas son enfermedades cotidianas de los perros y por ello pueden llegar a sentirse y verse muy mal. Pero el pelaje talvez nos impida comprobar si su temperatura está normal. Los perros suelen tener más temperatura que los humanos 38° casi 39° y de consiguiente, quizá nos parezcan afiebrados cuando no lo están. Aunque no requiere ciencia comprobar su temperatura con un termómetro, lo mejor es dejarlo al veterinario porque los perros suelen ser inquietos y tomar la temperatura podría convertirse en un problema de verdad serio.
Pero cómo comprobar la temperatura del perro, si nuestro perro se encuentra decaído, falto de apetito y triste, para qué averiguar más, es evidente que algo le pasa; puede ser que tenga catarro, puede ser que le duela el estómago que hasta el más grande de los perros sufre de cólicos. El procedimiento para evaluar la temperatura es introducir en el ano, un termómetro impregnado de vaselina y mantenerlo entre 2 a 3 minutos. Pero, si tu perro es inquieto, no tienes quien te ayude a controlarlo, y sobretodo duda sobre cómo proceder, mejor dejarle al médico veterinario el asunto.
Hay que llevarlo de inmediato y el veterinario como suele suceder también, a simple vista por su experiencia podrá adelantarnos qué es lo que le pasa a nuestro perro, y si el problema es una gripe, una infección o quiere comprobar la temperatura, lo hará y claro sin riesgo alguno y con la pericia que deviene de la experiencia. Y a partir de ahí diagnosticará el problema y nos dará la solución recomendando medicamento o lo que considere oportuno para que el perro se sienta mejor. A veces no es necesario comprobar la temperatura pero eso solo lo decide el veterinario.
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