Todos hemos visto en el zoológico o la televisión, a las avestruces, enormes aves que suelen llegar a medir hasta 3 metros y pesar unos 180 kgs lo que las sitúa como las aves más grandes. Los polluelos suelen ser ya de por si más grandes que los de cualquier otra especie con 900 g al nacer miden entre 25 y 30 ctms. Su apariencia es un tanto extraña y hay que decirlo poco atractiva si comparamos el avestruz con otras aves de hermoso plumaje.
Las avestruces tienen alas pequeñas por lo que no pueden volar, pero les sirven para tomar equilibrio al correr y a agitarlas para asustar a sus posibles atacantes, la cabeza es más pequeña en relación al cuerpo, tiene buena vista con unos ojos de cinco centímetros de diámetro, el pico es plano y de punta roma, el cuello carece de plumas al igual que sus largas patas con solo dos enormes dedos.
Pero tiene patas musculosas que le permiten correr a gran velocidad, una avestruz puede alcanzar hasta más de 90 km/h durante una media hora sin mermar su velocidad, y esas mismas patas pueden infligir dolor a sus atacantes, porque le sirven para atacar. A diferencia de otras aves que no sobreviven mucho en el cautiverio, las avestruces criadas en cautiverio logran vivir hasta 50 años, en su hábitat natural viven entre 30 y 40 años.
Consideradas en algunos lugares especie en extinción, las avestruces no viven más que en zoológicos así que como mascotas por su tamaño y apariencia, así como por sus formas de actuar, su necesidad de actividad y su velocidad. Por demás vive muy bien en regiones distantes del mundo, habiéndose originado en Africa se le encuentra hoy en día en todos los continentes sobretodo en el continente americano a donde sus huevos y carne son apreciados en muchas recetas de platos con avestruz.
Imagen: Avestruces