Actualmente, como todos sabemos, hay animales que se encuentran en peligro de extinción. Este hecho puede deberse tanto a una mala actuación de la mano del hombre que ha llevado a algún animal al límite de sus resistencias, a que no se adapten a los cambios que ha surgido su entorno en cuanto a la temperatura o que unos depredarores mayores que ellos están dinamitando su especie.
El burro catalán es una raza de asno catalana que proviene originalmente de la zona de Gerona. A día de hoy podemos encontrar solamente cerca de 400 ejemplares de esta raza de asnos. Este es un caso claro de interacción del hombre para que se extinga poco a poco. En los entornos rurales catalanes se ha dejado de utilizar prácticamente el burro pasando a utilizar maquinaria más eficiente para los trabajos. Por otro lado para transportarse ya no es necesario viajar en burro porque disponemos de medios más veloces.
El burro mallorquín y el italiano
El burro mallorquín (raza mallorquina), el italiano (asno de Pantelería) y el catalán son tres razas completamente ligadas unas a las otras. El primero es entre los burros el más semejante al catalán respecto a morfología y carácter aunque es un poco más bajo.
Por su parte el asno de Pantelería se extinguió hace unos 70 años en Sicilia, Italia y el gobierno intenta recuperar la raza a partir de algunos ejemplares cruzados que han conseguido sobrevivir. En una pequeñísima isla italiana de Pantelaria todavía aguantan estos burros y la meta es conseguir no solo que sobrevivan unos pocos si no que en un tiempo dejen de estar en extinción.
La pegatina del burro
Por el año 2004 dos amigos decidieron crear una pegatina con la silueta del burro catalán con la idea de recordar a sus vecinos que los burros catalanes se están extinguiendo poco a poco. Estos amigos colocaron la pegatina en la parte trasera de sus coches y fue todo un éxito, los vecinos demandaban camisetas, otro tipo de pegatinas y más merchandising.
Ahora es un emblema de los catalanes que les recuerda día a día que deben cuidar a los burros. De hecho, como todas las cosas que comienzan con una idea positiva de ecologismo a veces se desvirtuan. Actualmente llevar esta pegatina puede estar ligado al nacionalismo catalán y a la oposición del toro de Osborne.